Que los resultados obtenidos en nuestros test sean negativos, no significa que no se haya fallado, indica que la hipótesis/variante probada no es la ganadora sin más.
En realidad, estos resultados son valiosos y proporcionar información y aprendizajes importantes para continuar con el proceso de mejora continua.
¿Qué aprendemos?
▶ Aprendizaje y nuevo conocimiento.
Los resultados negativos pueden ayudar a identificar lo que no funciona o lo que no resuena con el público objetivo.
Esta información puede ser extremadamente valiosa para refinar estrategias y tácticas futuras.
▶ Revisar la estrategia diseñada.
A veces, es igual de importante saber lo que no funciona como lo que sí funciona.
Los resultados negativos pueden ayudar a descartar enfoques que no generan un impacto positivo en los objetivos del negocio, lo que ahorra tiempo y recursos a largo plazo.
▶ Afinar en las hipótesis propuestas.
Cuando los resultados no son los esperados, es una oportunidad para revisar y refinar las hipótesis subyacentes.
Esto puede llevar a la creación de hipótesis más sólidas para futuras pruebas.
▶ Mejora de la metodología.
Los resultados negativos pueden indicar que la metodología empleada en los test no haya sido la más adecuada.
Realizaremos ajustes y mejoras en la forma en que se diseñan y ejecutan los nuevos test.
▶ Conocer mejor a nuestra audiencia.
En ocasiones, los resultados negativos pueden ayudar a conocer mejor las preferencias y comportamientos del público objetivo/usuarios, descubrimos intereses que nosotros no habíamos tenido en cuenta, eso no hará cambiar lo visión de la propuesta para futuros test.
▶ Contexto cambiante.
Los resultados negativos pueden deberse a factores externos o cambios en el entorno que no se pueden controlar.
Estos resultados pueden no ser un indicativo de que la hipótesis propuesta sea fallida, sino más bien una señal de que las circunstancias han cambiado.
Cada test, con independencia de que su resultado sea positivo o negativo, aporta datos que pueden utilizarse para tomar decisiones y perfeccionar las estrategias de optimización con el tiempo.
La clave está en aprender de los resultados, ajustar la estrategia en consecuencia y seguir adelante con un enfoque basado en datos y aprendizaje continuo.
¿tienes problemas?, no sabes hacer marketing digital, no tienes tiempo.